Es una filosofía de vida de origen oriental con más de 4.000 años de antigüedad, que utiliza la energía sexual para conseguir una conexión con uno mismo. con más de 4.000 años de antigüedad, que utiliza la energía sexual para conseguir una conexión con uno mismo.

Se enfocan principalmente en la meditación, la espiritualidad y el desarrollo personal.

Tiene que ver con la transmutación de la energía, la liberación de la mente y el logro de todo el potencial de la persona

EL tantra no se puede explicar con palabras, el tantra se experimenta, se vive y se siente. Lejos de la lectura occidental de que el tantra es el kamasutra o se refiere a sexo, es una experiencia con y para uno mismo que ayuda a esclarecer la mente, aportar consciencia y liberar estancamientos energéticos que provocan malestar en muchas ocasiones.

En mi experiencia el tantra ya formaba parte de mi antes de conocerlo. Sentía una necesidad de expandir mi cuerpo y me daba el permiso poniéndome música, cerrando los ojos y haciendo los movimientos que él necesitaba. Esa necesidad de expresión indicaba que algo dentro de mi estaba estancado y al hacer el baile me sentía liberada. Al empezar con la formación entendí que toda mi vida había sido tántrica, que gozo de placer cuando hago las cosas que me gustan porque estoy presente y abierta, y no hablo de sexo (que ojalá hubiera llegado a mi está sabiduría en mis primeras relaciones, otro gallo hubiera cantado) hablo de liberación. Ser libre es un sentimiento , es la capacidad de hacer algo sobre tu propia voluntad y cuando me doy ese permiso soy 100% libre, esto me aporta el TANTRA, LIBERTAD!